¿Cómo actúa el veterinario si tu mascota tiene problemas para respirar?
Tiempo estimado de lectura: 13 minutos
Conclusiones clave
- La dificultad respiratoria es una urgencia veterinaria que debe ser atendida de inmediato.
- Un veterinario realiza una evaluación clínica, exámenes diagnósticos y tratamiento de soporte para estabilizar al animal.
- Cuanto antes se actúe, mayores serán las probabilidades de recuperación sin secuelas.
Signos de que mi mascota no respira bien
La disnea o dificultad respiratoria puede presentarse de distintas formas, y es importante reconocer los signos a tiempo. Algunos síntomas incluyen:
- Respiración acelerada o entrecortada
- Ruidos respiratorios como silbidos o estertores
- Boca abierta al respirar (especialmente en gatos)
- Color azulado o grisáceo en encías o lengua (cianosis)
- Movimientos abdominales marcados al respirar
- Tos frecuente, con o sin flemas
- Letargo, desmayo o dificultad para moverse
Ante cualquiera de estos síntomas, lo correcto es acudir de inmediato al veterinario. No se debe esperar a que empeore.
¿Cuáles son las causas de la dificultad respiratoria en mascotas?
Los problemas respiratorios pueden tener muchas causas, desde patologías leves hasta enfermedades graves. Algunas de las más comunes incluyen:
Enfermedades infecciosas
- Resfriados, gripe o traqueobronquitis
- Neumonía bacteriana o vírica
Problemas cardíacos
- Insuficiencia cardiaca congestiva
- Soplos, arritmias o miocardiopatías
Traumatismos
- Golpes en el pecho
- Hernias diafragmáticas
Obstrucciones
- Cuerpos extraños en narinas, faringe o tráquea
- Tumores u obstrucción por colapso traqueal
Alergias o anafilaxia
- Reacciones a picaduras, alimentos o fármacos
Problemas estructurales
- Razas braquicéfalas (bulldog, carlino, persa) con síndrome respiratorio obstructivo
Solo un profesional está capacitado para identificar la causa real y aplicar el tratamiento adecuado.
¿Cómo actúa un veterinario en casos de problemas respiratorios?
Cuando un paciente llega a la clínica con dificultad para respirar, el veterinario actúa rápidamente para estabilizarlo y determinar la causa. El protocolo general incluye:
1. Evaluación clínica inmediata
- Valoración del patrón respiratorio y frecuencia
- Observación del color de las mucosas y reflejos
- Auscultación torácica con fonendoscopio para detectar ruidos anormales
2. Oxigenoterapia
- Administración de oxígeno mediante mascarilla, jaula de oxigenación o cánulas nasales
3. Manejo con tranquilidad
- Reducción del estrés del animal evitando movimiento innecesario
4. Historia clínica completa
- Se pregunta al tutor sobre antecedentes, síntomas, alimentación y antecedentes médicos
Diagnóstico veterinario cuando una mascota no respira bien
Además del examen físico, el veterinario puede realizar diversas pruebas para determinar el origen del problema respiratorio:
Radiografías torácicas
- Permiten observar pulmones, corazón y estructuras torácicas
Análisis de sangre
- Identifican infecciones, desórdenes metabólicos o fallo orgánico
Ecocardiografía
- Evalúa el estado del corazón y permite diagnosticar enfermedades cardíacas
Broncoscopia o lavado broncoalveolar
- Herramientas más específicas para el análisis de vías respiratorias bajas
En casos muy graves, el veterinario puede optar por hospitalización inmediata para monitorear en tiempo real los signos vitales del animal.
Tratamiento y cuidados en casos respiratorios
El tratamiento depende de la causa, pero el objetivo principal es siempre asegurar el oxígeno adecuado y aliviar al animal. Las opciones pueden incluir:
Medicamentos
- Antibióticos o antivirales en caso de infección
- Fármacos antiinflamatorios o broncodilatadores
- Diuréticos si hay líquido acumulado en los pulmones
Cirugías o procedimientos invasivos
- Extracción de cuerpos extraños
- Reparación de hernias o malformaciones
Soporte respiratorio
- Oxigenoterapia continua
- Monitoreo intensivo en hospitalización veterinaria
Una vez estabilizada la situación, se dan pautas de cuidado en casa como medicación, reposo y seguimiento periódico.
¿Cuándo acudir al veterinario de urgencia?
Ante cualquier signo evidente de dificultad respiratoria, no hay que esperar. Pero especialmente cuando el animal presenta:
- Encías azuladas o pálidas
- Desmayos o convulsiones
- Respiración muy rápida y forzada
- Vómitos repetitivos junto con jadeos
- Hinchazón del abdomen o del pecho
En estos casos, el traslado debe ser inmediato y sin demoras. Evita automedicar a tu mascota.
Consulta este artículo para saber cuándo los vómitos son una urgencia veterinaria.
¿Cómo prevenir problemas respiratorios en mi mascota?
Algunas medidas de prevención pueden reducir significativamente los riesgos respiratorios en tu compañero peludo:
Vacunación al día
- Evita enfermedades infecciosas que afectan las vías respiratorias
Ambiente libre de humo y contaminantes
- Evita la exposición a tabaco, ambientadores o productos de limpieza agresivos
Ejercicio moderado y control de peso
- Los animales con sobrepeso tienen mayor riesgo de problemas respiratorios
Revisiones veterinarias periódicas
- Permite detectar patologías antes de que causen complicaciones
También es importante ofrecer un entorno adecuado para gatos sedentarios. Aprende cómo llevarlos al veterinario sin estrés.
Además, si tu mascota tiene predisposición a enfermedades respiratorias, considera tener acceso a consultas urgentes o videollamadas con veterinarios. En Whopaws puedes hacerlo en cuestión de minutos.
Preguntas frecuentes
- ¿Mi mascota jadea pero no está haciendo ejercicio, qué hago?
- El jadeo en reposo puede ser signo de fiebre, dolor, ansiedad o problemas respiratorios. Consulta con un veterinario lo antes posible.
- ¿Qué puedo hacer en casa si mi mascota no respira bien?
- Lo más importante es mantener la calma, no forzar al animal a moverse más y acudir cuanto antes al veterinario. En casa solo puedes asegurarte de que respire en una posición cómoda.
- ¿Los gatos se resfrían como los humanos?
- Sí, los gatos pueden sufrir rinitis, estornudos y congestión nasal. Aunque suele ser leve, si impide respirar con normalidad es necesario tratamiento.