Conclusiones clave

• El control veterinario preadoptivo es una evaluación médica previa a la adopción de una mascota que garantiza su estado de salud y bienestar.
• Incluye revisiones físicas, vacunas, desparasitaciones y pruebas diagnósticas básicas.
• Este control es fundamental para evitar enfermedades, promover la tenencia responsable y facilitar una adaptación exitosa en el nuevo hogar.

¿Qué es el control veterinario preadoptivo?

El control veterinario preadoptivo es una evaluación médica llevada a cabo por un profesional veterinario antes de que un animal sea dado en adopción. Su objetivo es verificar el estado general de salud de la mascota, confirmar que está libre de enfermedades potencialmente contagiosas o graves y que se encuentra en condiciones óptimas para ser adoptada por una nueva familia.

Este proceso también permite registrar el historial clínico inicial del animal y establecer las bases para planificar futuras visitas veterinarias, vacunas y tratamientos preventivos.

¿Por qué es importante realizarlo antes de adoptar?

Adoptar una mascota implica una gran responsabilidad. Un control previo garantiza que el animal que entra en casa no supondrá un riesgo para otros animales del hogar ni para las personas, especialmente niños, personas mayores o inmunocomprometidos.

Además, permite identificar posibles patologías que puedan requerir tratamiento o seguimiento, evitando sorpresas y gastos imprevistos para el adoptante. También se evalúan aspectos conductuales básicos que orientan sobre el temperamento y adaptabilidad del animal.

• Previene enfermedades infecciosas.
• Evita la adopción irresponsable o impulsiva.
• Facilita una integración más segura y saludable.
• Ofrece tranquilidad al adoptante y bienestar al animal.

¿Qué incluye una revisión veterinaria preadoptiva?

El control preadoptivo puede variar según el tipo de animal, su edad y si ha pasado por una entidad de protección animal, aunque generalmente incluye:

1. Exploración física general

• Evaluación de ojos, oídos, boca, piel, articulaciones y signos vitales.
• Comprobación del peso, condición corporal y desarrollo físico.

2. Desparasitación interna y externa

• Tratamiento preventivo frente a pulgas, garrapatas y parásitos intestinales.

3. Pruebas y diagnóstico básico

• Test rápidos para detectar enfermedades víricas comunes (como leucemia felina o parvovirus canino).
• Confirmación de la ausencia de síntomas patológicos o trastornos visibles.

4. Plan de vacunas

• Inicio o revisión del calendario vacunal según la especie y edad.

5. Recomendaciones sobre comportamiento y socialización

• Consejos sobre cómo adaptar el entorno, rutinas básicas y señales de estrés.

¿Quién realiza este control y cuándo debe hacerse?

El control preadoptivo debe ser realizado por un veterinario colegiado, idealmente en un centro con experiencia en adopciones o bienestar animal. Las protectoras y asociaciones responsables suelen incluir esta revisión en sus procesos, pero si adoptas por vía particular o a través de amigos o conocidos, es fundamental acudir al veterinario antes de formalizar la adopción.

El momento ideal para hacer este control es antes de que la mascota entre en su nuevo hogar. De este modo, cualquier tratamiento, aislamiento temporal o medida preventiva necesaria puede tomarse a tiempo.

El papel del control veterinario preadoptivo en las protectoras

Las protectoras responsables en España gestionan el control veterinario de los animales que tienen en acogida para asegurar que se encuentren en las mejores condiciones antes del proceso de adopción.

Generalmente, los animales en estas entidades:

• Están identificados mediante microchip.
• Reciben las primeras vacunas correspondientes.
• Son esterilizados, si su edad lo permite.
• Han pasado por una desparasitación rigurosa.

Estas entidades colaboran con clínicas veterinarias que entienden la importancia del bienestar animal y suelen ofrecer precios especiales para seguir el seguimiento post-adopción.

¿Cómo afecta al adoptante y a la mascota?

El control veterinario preadoptivo beneficia a todas las partes involucradas en la adopción:

Para el adoptante:

• Le brinda información clara sobre la salud y necesidades del animal.
• Le permite prepararse logísticamente (medicación, vacunación, alimentación).
• Fortalece la confianza hacia la entidad de adopción y facilita la toma de decisiones.

Para la mascota:

• Recibe atención médica oportuna.
• Se evitan situaciones que puedan generarle dolor o enfermedades.
• Cuenta con un historial clínico básico que podrá acompañarle durante toda su vida.

Además, detectar a tiempo posibles enfermedades contagiosas evita la propagación a otros animales, algo especialmente crítico si en casa hay más mascotas.

¿Qué pasa después de la adopción? La importancia del seguimiento veterinario

El control preadoptivo marca solo el inicio del cuidado veterinario que toda mascota necesita. Es clave mantener un programa de revisiones periódicas con el veterinario, controles del peso y nutrición, así como planes vacunales y desparasitaciones actualizados.

A medida que la mascota envejece, también es importante considerar revisiones especializadas como las revisiones para mascotas senior, especialmente si provienen de ambientes difíciles o han vivido en la calle.

Preguntas frecuentes

¿Puedo adoptar una mascota sin hacer control veterinario?

Legalmente es posible, pero desaconsejable. Sin este control no conoces el estado real de salud del animal ni si existe riesgo para otros miembros del hogar.

¿El control veterinario preadoptivo tiene coste?

Algunas protectoras lo incluyen en el proceso de adopción. Si lo haces por cuenta propia, el coste dependerá del veterinario, pero es una inversión mínima para garantizar salud y seguridad.

¿Cómo puedo saber si el animal tiene chip y está registrado?

Durante el preadoptivo, se comprueba si existe microchip y se registra a nombre del nuevo responsable. Con Whopaws puedes gestionar fácilmente la información del chip y su identificación digital.

¿Qué hago si tras mi adopción mi perro presenta síntomas de enfermedad?

Ante cualquier síntoma como vómitos, hinchazón abdominal, fiebre o letargo, acude al veterinario. Puedes consultar estos casos en recursos como qué hacer si tu perro tiene el estómago hinchado o síntomas del parvovirus.