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Los pasos a seguir para que tu jerbo confíe en ti

Para poder manipular correctamente los jerbo es importante una relación de confianza y es laborioso debido a su naturaleza.

Niña con jersey de colores que sujeta un jerbo blanco en sus manos en forma de cuchara

Como hacer para que tu jerbo confie en ti 

Antes de poder coger tu jerbo en la mano es necesario que sepas cómo ganarte su confianza. El adiestramiento de estos animales no es imposible, pero sí conlleva mucha paciencia y tiempo. 

  1. Ofrece chuches de un tamaño pequeño como por ejemplo las migas de pan.
  2. Mete la mano en el terrario tocando el substrato, deja que tu jerbo se acerque y te huela. Nunca fuerces un contacto si no es él quien se acerca.
  3. No hagas movimientos bruscos porque los jerbos son muy asustadizos.
  4. Apoya la mano en el substrato y esconde premios debajo de tu mano para que tus jerbos interactúen contigo y se acostumbren al contacto.

No  persigas a tu jerbo, ni intentes cogerlo si no quiere porque generas una situación de estrés y podría morderte.

Cómo coger un jerbo

Como hemos dicho antes no intentes coger tu jerbo si no quiere, deja que sea el que suba a tu mano, tu mango o por tus brazos. Lo podrás conseguir trabajando su confianza. Cuando la tengas ganada, apoya tu mano en el substrato y mantenla quieta. El jerbo subirá solo cuando se sienta listo, no obstante tendrás que valorar cuánto tiempo quiere quedarse y estar preparado para devolverle a su hogar.  

Cuando se acerquen a ti premiales y acariciales para fortalecer vuestro vínculo.

Cómo agarrar un jerbo 

Si un jerbo no tiene bastante confianza para subirse solo, puedes usar el método “cuchara”. Aunque lo menos estresante para ellos, la mayoría de veces, es que suban solo puedes utilizar este método para “forzar” un poco el contacto. 

  • Rodea el jerbo con tus manos. 
  • Apoya el dorso de las manos en el substrato.
  • Junta las manos por debajo de tu jerbo.

Hay que estar siempre pendiente y mirar la señales que te da tu jerbo. Lo mejor es empezar de baja alturas por si intenta saltar. Puedes poner chuches apetitosas en la palma de tus manos para que la experiencia sea todavía más positiva. No olvides tener paciencia e intentarlo hasta que tu jerbo gane confianza.

Como no hay que manipular un jerbo

  • No cogas nunca un jerbo de la cola. Podrías causar la pérdida del pelo o, incluso, la pérdida de la cola. En la naturaleza son presas y si valoran que su cola podrías ser una debilidad se la “cortan” y escapan. No es tan frecuente como en los reptiles, pero puede pasar. La herida que se queda puede infectarse y causar mucho dolor.
  • No agarres nunca un jerbo desde arriba como si tu mano fuera una pinza. Visto su naturaleza de presas podrías causarle un fuerte estrés ya que estarías reproduciendo el gesto de caza por un depredador.

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